1 cucharada de miel cruda (preferiblemente orgánica)
De 5 a 6 dientes de ajo, enteros o molidos.
Instrucciones:
Tritura el ajo y déjalo reposar durante unos 10 minutos . Esto permite que la alicina, el ingrediente activo curativo más importante del ajo, se active.
Mezcla el ajo y la miel en un frasco pequeño y revuelve bien hasta que estén completamente cubiertos de miel .
Agrega los clavos de olor (enteros o molidos) y vuelve a mezclar para que se combinen los aromas y las propiedades medicinales.
Cierra bien el frasco y déjalo reposar durante al menos 24 horas . Durante este tiempo, la miel disuelve los valiosos ingredientes del ajo y los clavos, formando un jarabe dorado y rico en nutrientes.
Cómo usar la mezcla
Refuerzo del sistema inmunitario: Tome 1 cucharadita cada mañana en ayunas para reforzar su sistema inmunitario.
Digestivo: Tomar una cucharada después de las comidas para mejorar la digestión y reducir la hinchazón.
Dolor de garganta: Mezclar con agua tibia para preparar un té calmante y natural.
Dolor o inflamación articular: Masajee una pequeña cantidad sobre las zonas doloridas y envuélvalas en una toalla caliente durante unos minutos para aliviar las molestias.
Seguridad y almacenamiento
Debe evitarse su uso excesivo si padece presión arterial baja o si está tomando medicamentos anticoagulantes .
Para preservar la eficacia de la mezcla, guárdela en un frasco de vidrio hermético en un lugar fresco y oscuro.
Esta mezcla es segura para la mayoría de los adultos. Sin embargo, si padece alguna afección médica preexistente o tiene alguna duda, consulte a su médico.
Esta sencilla pero poderosa combinación de ajo, miel y clavo demuestra cómo los ingredientes naturales pueden favorecer la salud de diversas maneras: desde fortalecer el sistema inmunitario hasta mejorar la digestión y aliviar la inflamación. Tan solo una cucharadita al día puede tener un impacto sorprendentemente significativo en tu bienestar general.
Nota: Esta información se proporciona únicamente con fines educativos y no sustituye la consulta, el diagnóstico ni el tratamiento médico profesional. Si tiene algún problema de salud o dudas sobre medicamentos, consulte siempre a su médico.
