Así que podéis ver que esta es una fiesta que es una experiencia instantánea.

Mezcle bien hasta que todos los ingredientes estén bien integrados. Agregue los pimientos rojos asados picados a la mezcla y revuelva hasta que estén bien distribuidos.
Espolvoree la cebolla en polvo y la mostaza seca. Si lo desea, agregue una o dos pizcas de pimienta de cayena para darle un toque picante. Mezcle todo hasta que esté bien integrado. (También puede usar una batidora eléctrica si lo desea).
Si prefiere un sabor más suave, agregue el perejil seco e incorpórelo a la salsa. Este paso es opcional y puede omitirse si lo desea.
Una vez que la salsa esté bien integrada, cubra el tazón con film transparente o transfiéralo a un recipiente hermético. Refrigere durante al menos 1 hora, preferiblemente toda la noche, para que los sabores se integren.
Antes de servir, revuelva rápidamente la salsa para asegurar que esté bien integrada. Si lo desea, decore con más pimientos rojos asados picados o una pizca de perejil. Sirve la salsa de queso y pimiento con tus galletas, totopos o palitos de verduras favoritos. ¡Que los disfrutes!