Durante el invierno, las lluvias frecuentes suelen aumentar la humedad en paredes y superficies exteriores. Dentro de la casa, el aire se satura con una humedad que no tiene salida, lo que provoca condensación, moho y hongos. Afortunadamente, hay medidas que puede tomar para proteger su hogar de los altos niveles de humedad. Le explicamos cómo aquí.

La humedad daña su hogar.
Además de disminuir su atractivo visual, el aumento de humedad permite la propagación de esporas de moho. Puede causar daños significativos a la estructura del edificio, incluyendo la posibilidad de filtraciones de agua y la acumulación de eflorescencias (salitre). Este depósito de sales minerales puede causar mayores daños con el tiempo y es consecuencia directa de la alta humedad.Así como su hogar se ve afectado por la humedad, también lo es su cuerpo. El personal médico profesional de la Clínica Mayo afirmó que, al inhalar pequeñas esporas de moho, el cuerpo las reconoce como una sustancia extraña y produce anticuerpos para combatir la invasión. Esto puede provocar síntomas como congestión nasal, irritación y picazón en los ojos, la nariz o la garganta.

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