¿Te preguntas cómo es un huevo de calidad? Aquí te explicamos cómo distinguir un huevo bueno de uno malo:
1. Densidad y dureza de la cáscara.
Las gallinas sanas producen huevos con una cáscara muy dura, y los huevos sanos son un poco difíciles de romper. Si has notado que la cáscara de tus huevos se rompe fácilmente, significa que la calidad del huevo no es buena.
2. El color de la yema
El amarillo claro o brillante no es el color ideal de la yema, aunque probablemente sea el que la gente suele ver. Un huevo sano tiene una yema de color naranja intenso.
3. El grosor de la yema
La calidad del huevo también se determina por el grosor de la yema. Las yemas sanas son más redondas y gruesas.
Los investigadores afirman que una nutrición saludable es clave para producir huevos sanos. Por ejemplo, la cantidad de betacaroteno puede aumentar si se alimenta a la gallina con más betacaroteno.
