Si el dolor persiste leve, algunos ingredientes naturales pueden ayudarte:
Tratamiento de la deficiencia de vitamina D
Suplemento de vitamina D
Infusión de jengibre y cúrcuma: un potente antiinflamatorio para reducir el dolor muscular.
Baños de sal de Epsom: El magnesio que los compone relaja los músculos y alivia los calambres.
Aceite de magnesio: aplicar en las piernas para una mejor recuperación muscular.
Masaje con árnica: conocido por sus propiedades antiinflamatorias, este aceite es perfecto para el dolor persistente.
Jugo de zanahoria y naranja: un cóctel de vitaminas rico en betacaroteno y vitamina C para fortalecer tus huesos.
suplementos de magnesio
¿Cuándo debes consultar al médico?
Si a pesar de estos consejos el dolor persiste o empeora, es fundamental consultar con un profesional de la salud.
¡No dejes que el dolor te frene! Lleva una dieta rica en vitaminas y minerales, exponte al sol con frecuencia y aplica estos consejos naturales para renovar tu bienestar y vitalidad.
