3. Personas propensas a alergias o irritaciones oculares:
Cuando pensamos en alergias, solemos pensar en el polen, pero la col, especialmente la fermentada o encurtida, también puede provocar reacciones alérgicas. Los síntomas pueden incluir picazón, ojos llorosos, estornudos o incluso sangrado ocular (hemorragias subconjuntivales).
Esto se debe a las histaminas naturales que contiene la col. Si es sensible a la histamina o ha tenido alergias oculares, la col podría no ser adecuada para usted.
4. Personas que padecen problemas renales
El repollo puede parecer inofensivo, pero contiene ácido oxálico, una sustancia que puede unirse a minerales como el calcio y formar cálculos renales.
Si ha tenido cálculos renales o padece alguna enfermedad renal, consulte a su médico antes de añadir repollo a sus comidas. Cocinarlo bien y cortarlo en trozos pequeños puede ayudar a reducir el riesgo.
Recetas de verduras saludables
Reflexiones finales:
El repollo es sin duda una fuente de nutrientes, pero sus beneficios no son universales. Para algunos, la clave reside en la moderación, una preparación cuidadosa o incluso en evitarlo por completo.
En definitiva, el equilibrio y la conciencia corporal son clave. Con el enfoque adecuado, podrás disfrutar de tu próxima ración de repollo con seguridad y placer.
