Enriquecido con sulfato de condroitina y gelatina, el caldo de huesos ofrece alivio natural a las personas que sufren de osteoartritis, a diferencia del café y el alcohol, que empeoran la inflamación articular.
Favorece la reparación y regeneración de los tejidos.
Gracias a su riqueza en colágeno, el caldo de huesos apoya la reparación y renovación de los tejidos del cuerpo, acelerando la curación de lesiones internas.Compensa las deficiencias minerales.
Durante la cocción, los huesos liberan minerales esenciales como calcio, fósforo, magnesio y potasio, que el cuerpo asimila fácilmente y en mayor cantidad que muchos otros alimentos.
Beneficios:
Refuerza el sistema inmunitario.
Tradicionalmente, el caldo de huesos se administra a niños y ancianos para fortalecer su resistencia a las enfermedades infecciosas, sobre todo durante la época de frío. La adición de hierbas como el jengibre, la cúrcuma o el astrágalo potencia aún más sus propiedades.
Reduce la inflamación.
Los aminoácidos antiinflamatorios del caldo de huesos, en particular la arginina, ayudan a reducir la inflamación crónica, que está implicada en muchas enfermedades.
Favorece la digestión.
⏩continúa en la página siguiente⏩
