Rocía los huesos asados con vinagre y déjalos reposar otros 30 minutos.
Transfiere los huesos a una olla de cocción lenta y agrega el resto de los ingredientes.
Vierte 1 litro de agua y lleva a ebullición a fuego alto.
Luego, reduce el fuego a bajo y deja cocer a fuego lento.
Retira la espuma que se forme en la superficie.
Continúa cocinando el caldo durante dos días, añadiendo agua según sea necesario.
Cuela el líquido y ajusta la sazón al gusto.
Guarda el caldo en frascos de vidrio.
Valor nutricional del caldo de huesos:
La composición exacta del caldo de huesos varía según la receta, el tipo de huesos utilizados, los ingredientes y el tiempo de cocción. Según datos del USDA, una taza de caldo casero de pollo o res proporciona, en promedio:
Información nutricional Cantidad por porción (1 taza)
Calorías 41
Proteínas 5 g
Carbohidratos 0 g
Grasas 3 g
Grasas saturadas 1 g
Colesterol 10 mg
Sodio 1000 mg
Potasio 98 mg
Calcio 9 mg
Magnesio 4 mg
Fósforo 14 mg
Hierro 0,1 mg
Zinc 0,1 mg
Nota: Los valores nutricionales pueden variar según la fuente de huesos utilizada.
El contenido de colágeno, gelatina y aminoácidos (glicina, glutamina, prolina) varía según el método de cocción y no siempre se mide en los análisis nutricionales estándar. El caldo de huesos se solidifica debido a su alto contenido en gelatina, y la grasa que se deposita en la superficie no necesita retirarse. Se recomienda comenzar el día con una taza de caldo caliente o tomarlo antes de acostarse. El caldo de huesos también puede usarse para espesar sopas y salsas, aportándoles sabor y beneficios para la salud.
