Preparar la masa:
En un tazón grande, mezcla el almidón de yuca, el queso rallado y la sal.
En una olla pequeña, calienta la leche y el aceite (o mantequilla) hasta que estén tibios (no deben hervir).
Agrega la mezcla de leche y aceite al tazón con los ingredientes secos.
Incorpora el huevo y mezcla hasta formar una masa homogénea y ligeramente pegajosa.
Formar las bolitas:
Con las manos ligeramente humedecidas, toma porciones pequeñas de la masa y forma bolitas del tamaño de una nuez.
Colócalas en un plato o bandeja mientras terminas de formar todas.
Cocinar en sartén:
Calienta una sartén antiadherente a fuego medio-bajo.
Coloca las bolitas de pan de queso en la sartén, dejando espacio entre ellas.
Tapa la sartén y cocina durante 5-7 minutos, dándoles la vuelta con cuidado para que se doren por todos lados.
Retira cuando estén dorados y esponjosos.
Opción de freír:
Si prefieres freírlos, calienta suficiente aceite en una sartén y fríe las bolitas hasta que estén doradas y crujientes. Escurre sobre papel absorbente.
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