A menudo oímos hablar del número ideal de horas de sueño, pero con menos frecuencia de cómo dormimos. Sin embargo, la postura que adoptamos cada noche puede influir profundamente en nuestro bienestar. Algunas posturas favorecen un sueño reparador y una buena circulación, mientras que otras pueden, a largo plazo, afectar nuestra postura, respiración o incluso digestión.
Entonces, ¿duermes del lado correcto?

Dormir boca abajo: un hábito que conviene evitar

Si sueles dormir boca abajo, quizá sea hora de reconsiderar esta postura. Aunque a primera vista pueda parecer cómoda, muchos especialistas del sueño la desaconsejan.

¿Por qué? Porque ella:

Obliga a girar la cabeza hacia un lado durante horas, provocando tensión en el cuello.
Desalinea la columna, lo que puede causar dolor de espalda.

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