Tomar agua al despertar, antes de consumir cualquier alimento o bebida, es una práctica ancestral con bases fisiológicas sólidas. Tras 6-8 horas de sueño, el cuerpo está en estado de ayuno y leve deshidratación. Reponer líquidos en este momento activa funciones vitales de forma suave y natural. Sin embargo, es crucial separar los beneficios comprobados de los mitos exagerados (“cura todo”, “desintoxica milagrosamente”). Aquí el análisis objetivo, recetas prácticas y cómo incorporarlo con sentido común.
Beneficios Fisiológicos Respaldados:
Rehidratación Celular: Repone el agua perdida por respiración, transpiración y funciones metabólicas nocturnas. Mejora el transporte de nutrientes y la eliminación de desechos.
⏩continúa en la página siguiente⏩
